
La FELICIDAD es una condición intrínseca del SER, igual que vivir (experimentar) o autoconocerse. La felicidad está ligada a la gratitud, al hecho de agradecer tener vida. Ocurra lo que ocurra en nuestra vida, por muy tristes o abrumados que nos sintamos una temporada, no podemos dejar de ser felices. La felicidad no depende de las cosas externas, es una cualidad inherente al hecho de existir.

La FELICIDAD no es un estado de euforia permanente, es la paz interior que provoca sentir que ‘todo está bien’ siempre y cuando seamos conscientes de que todo lo elegimos y creamos nosotros con un fin. Cuanto más conscientes seamos de nuestros pensamientos y actos, y sus posibles consecuencias o repercusiones, más maravillados estaremos ante el hecho de vivir.
La FELICIDAD es el resultado de saber que la vida es una decisión constante y ello nos genera un aprendizaje continuo. Todos somos a la vez actores y demiurgos con la responsabilidad de ACTUAR. Sal y vive como tú quieras vivir!.
Nota: Para localizar a aquellos que saben esto, busca un brillo singular en sus ojos, que lejos de ser reflejo de un foco externo, proviene de su inmensa luz interior.